Saturday, November 20, 2010

Pablo Malaurie en La Castorera

"Lluvia de animales cuando te conocí.
Piedras en el alma cuando no nos vimos más..."


Pablo Malaurie y su "festival de besos" son, como mínimo, particulares... por buscar un adjetivo amplio y no discriminatorio. Su tono de voz genera adeptos así como enemigos a los pocos minutos. Pero cuando gusta, como las buenas cosas, gusta mucho.

Tal vez es la simpleza musical de su guitarra y el teclado sintetizado que es reemplazado cada tanto por un acordeón. O sus letras de amor que como todo adolescente sufre los desamores y desventuras del sexo femenino. Pero sin dudas, deja algo onírico flotando en el aire. Algo aniñado que por los menos a mi, me remonta a canciones de cuna, bebes llorando y olor a talco. Esos primeros años de vida donde todo es tan simple y sólo hay que respirar para vivir. Esos momentos en que a uno lo cuidan mucho.

El clima, es fácil generarlo cuando los que van a verlo saben lo que van a buscar. Dos integrantes, un oso barbudo tocando los teclados con más pinta de leñador nórdico que de músico, enternece al contar que fue padre hace poco y Pablo Malaurie en la guitarra con una fotofobia importante que obligó al iluminador a dejarlo casi a oscuras sobre el escenario (ver video).

Un show para disfrutar de a dos. Una música para encarar con ganas de que a uno lo mimen.




Nota al pie: Escuhé por ahí que van a demoler a "La Castorera" a fin de año. Una gran pérdida en esta ciudad donde ya quedan pocos lugares decentes para escuchar buena música sin pagar precios exhorbitantes. Una pena... Traten de ir antes mientras exista...

0 comments:

Post a Comment